En Stop My Foreclosure resolvemos tus dudas

Preguntas frecuentes

Encuentra respuestas claras y directas a las preguntas más comunes sobre el riesgo de embargo, la venta de propiedades en dificultades y nuestras soluciones.

Es el proceso legal que inicia el banco cuando dejas de pagar tu hipoteca. Si no actúas a tiempo, podrías perder tu casa en una subasta.

Existen varias opciones, desde negociar con el banco hasta vender la propiedad antes de que llegue a subasta. Nosotros te ayudamos a encontrar la mejor solución según tu caso.

Es vender tu casa por menos de lo que debes en la hipoteca, con la aprobación del banco. Es una alternativa para evitar la ejecución y reducir el impacto en tu crédito.

  • Evitas el desalojo y las consecuencias de un riesgo de embargo.
  • Reduces el daño a tu historial crediticio.
  • Puedes negociar la condonación de la deuda restante.

Si enfrentas dificultades financieras y tu casa vale menos de lo que debes, podrías ser elegible.

Tu puntaje de crédito puede caer significativamente, afectando tu capacidad para obtener préstamos en el futuro. Una venta corta suele ser menos dañina que una ejecución.

Analizamos la ubicación, el estado de la propiedad y las ventas recientes en la zona para ofrecerte una cifra justa y competitiva.

Te damos una oferta en efectivo en 24-48 horas.

No. No cobramos honorarios, comisiones ni costos ocultos.

Un agente busca compradores y puede tardar meses en vender tu casa, cobrando comisiones. Nosotros compramos directamente, en efectivo y sin esperar.

Tú decides. Podemos cerrar en días o adaptarnos a tu ritmo.

No. Te damos una oferta sin compromiso y tú decides si quieres seguir adelante.

Sí, dependerá de tu situación financiera y del tipo de préstamo que busques. Después de una venta corta, algunos prestamistas pueden requerir un período de espera de al menos tres años, mientras que después de un riesgo de embargo, este plazo puede ser de hasta siete años. Sin embargo, existen programas y opciones que pueden ayudarte a volver a calificar antes.

Si tienes dificultades para pagar tu hipoteca, una venta corta suele ser la mejor opción. Aunque ambas afectan tu crédito, el riesgo de embargo tiene un impacto más negativo y te puede dificultar obtener préstamos en el futuro. Además, con una venta corta podrías negociar mejores condiciones con el banco y evitar el proceso legal de la ejecución.